La primera crujidera entre La Moneda chica y sus partidos
El miércoles 22 de diciembre los partidos de Apruebo Dignidad tuvieron la primera reunión tras el triunfo de Gabriel Boric en la elección presidencial. Ese día, cuando el comando todavía estaba ubicado en el cowork de Av. Italia, los presidentes de los cinco partidos que componen la coalición -Comunista (PC), Federación Regionalista Verde Social (FRVS), Convergencia Social (CS), Revolución Democrática (RD) y Comunes- decidieron darle plena libertad de acción al mandatario electo para la composición del gabinete.
Pero no fue lo único que se zanjó en aquella junta. También todos coincidieron y remarcaron que el ingreso de otros partidos al equipo presidencial no iba a definir la ampliación de la coalición.
Esta semana, a un mes de esas conversaciones, dichos acuerdos se pusieron en jaque tras la designación del gabinete, en el que incluyeron al Partido Socialista, el Partido por la Democracia (PPD), el Partido Radical (PR) y el Partido Liberal (PL).
El protagonismo que empezaron a adquirir los partidos que se autodenominan “Socialismo Democrático” puso en alerta a la coalición del presidente electo. De hecho, el viernes, cuando se realizó la anunciada junta con todo el equipo y los futuros ministros en la Casona Cañaveral, asistieron los presidentes del PS, PPD, PR y PL. Para Boric era una oportunidad de alinear al equipo y eliminar prejuicios hacia dicho bloque. Pero la señal no les gustó a todos, especialmente a aquellos que eran de la tesis de que “no había que abrir la coalición”.
Desde afuera, Jorge Sharp, alcalde de Valparaíso, adelantó el jueves una crítica ante esa situación:
“Llama poderosamente la atención que pareciera ser que la alianza de gobierno ya no es Apruebo Dignidad, sino que la alianza del gobierno es una alianza distinta a dichos partidos, con la inclusión básicamente de importantes y muy insignes militantes del Partido Socialista, del mundo de la ex Concertación al gabinete del Presidente Boric”, dijo a SoyTV.
Pero sus palabras también representan a algunos integrantes de Apruebo Dignidad. Y dicho malestar retrasó los planes de Boric, y de su equipo, que pretendía anunciar las 39 subsecretarías el viernes, y sólo pudo presentar a cinco nuevos cargos, que habían sido adelantados por La Tercera: Manuel Monsalve (PS), en Interior; Miguel Crispi (RD), en la Subdere; Claudia Sanhueza (RD), en Hacienda; y Macarena Lobos (Independiente, participó en la campaña de Yasna Provoste), en la Segpres. También informaron que Javiera Martínez (RD) se hará cargo de la Dirección de Presupuesto (Dipres). A Eduardo Vergara (PPD), que está listo en la subsecretaría de Prevención del Delito, no lo anunciaron.
¿El motivo de la tardanza con los subsecretarios? Los partidos de Apruebo Dignidad, inquietos por su poco protagonismo en el gobierno, se reunieron con Boric en la semana para evitar que pasara lo mismo con las subsecretarías y compensar sus posiciones en esos cargos.
En el comando decidieron postergar dos veces el anuncio. En un comienzo los miembros del equipo de Boric aseguraron que la lista se publicaría a más tardar el miércoles, pero la futura ministra del Interior, Iskia Siches, explicó que iban a tardar más de lo esperado. Luego, el jueves, la próxima vocera, Camila Vallejo, aclaró que esperaban entregar el listado el próximo martes (1 de febrero), bajo la excusa de que aún había que “chequear a los elegidos”.
En el equipo de Boric explicaron que al hacer ajustes en los listados, los nombres debieron ser enviados nuevamente a Unholster, empresa externa que ha analizado los antecedentes personales de los nombres sugeridos por los partidos al comando, para evitar problemas con las designaciones o conflictos de interés.
La firma de big data mantiene el vínculo con “La Moneda chica” y hasta el viernes seguía revisando antecedentes de posibles subsecretarios, además de seremis y otros cargos públicos.
Reclamos de última hora
El sábado 22 de enero, al día siguiente del anuncio del gabinete de Gabriel Boric, los dirigentes del PPD, que contará con Jeanette Vega en el Ministerio de Desarrollo Social, decidieron proponer un listado de nombres para postular a las subsecretarías.
El senador Ricardo Lagos Weber fue el encargado de llamar a los elegidos por el partido y en la tarde le enviaron las sugerencias al equipo de transición presidencial, adjuntando currículums y áreas de interés.
Lo mismo hicieron en el PL, Nuevo Trato y también en el PR, tras conversar con Giorgio Jackson para ver los pasos a seguir.
Pero en Apruebo Dignidad no les gustó esa iniciativa, porque el ingreso del PPD, partido al que habían dejado fuera de la coalición el año pasado -cabe recordar que la primaria con la PS Paula Narváez se cayó precisamente porque ella iba con el apoyo del PPD-, es algo que a muchos no los termina de convencer.
También, porque los partidos de la coalición del futuro gobierno enviaron los nombres de sus aspirantes a cargos públicos hace más de un mes, e incluso habían sido analizados por Unholster, que revisó los antecedentes de cada una de las personas.
De hecho, un presidente de partido detalla que antes del anuncio del gabinete en el comando le habían confesado que la nómina de subsecretarios estaba lista, pero la iniciativa del “Socialismo Democrático”, y la molestia de los partidos que se sintieron afectados con la elección de ministros, desordenaron la programación.
La ampliación del gabinete obligó a hacer ajustes y ahí los partidos incorporados a última hora intentaron proponer a sus elegidos.
Algunos defendieron los cambios de la última semana, porque son críticos con los nombres que circulaban para asumir en las subsecretarías.
“No podemos tener en subsecretarías a los políticos que no fueron seleccionados para ser ministros. No es una opción B, ni tampoco es una repartija. Esta es una tarea más técnica y necesitamos gente con experiencia”, asegura un dirigente de partido que estuvo en las negociaciones.
Las recomendaciones de los partidos fueron tomadas en consideración por el equipo de transición presidencial, quienes además quisieron escuchar la opinión de los ministros, recordando siempre que la decisión final es del presidente.
Pero el poder que empezaron a tomar los partidos ajenos a la coalición no gustó en Apruebo Dignidad. El caso más claro de disconformidad fue el de RD. En la tarde del martes la presidenta del partido, Margarita Portuguez, la vicepresidenta, Francisca Gallegos, y el secretario general, Sebastián Depolo, se reunieron con Boric para limar las asperezas que había dejado el anuncio ministerial en el que sólo se quedaron con dos de las 24 secretarías de Estado: Giorgio Jackson, en la Segpres, y Marco Antonio Ávila, en Educación. Menos que el PC (3) y el PS (4).
Además, en Revolución Democrática reclamaron que Jackson ni siquiera estaba en su listado de sugerencias, porque era “fijo”, es decir, de sus postulados sólo tomaron en cuenta a uno.
Al salir de la reunión, Portuguez aseguró que esperaba que su partido tuviera subsecretarías importantes para el proyecto transformador. Ánimos que se lograron calmar cuando se confirmó la presencia de Crispi, Sanhueza y Martínez en labores de la primera línea presidencial. De ahí en más, Portuguez salió a lamentar que hubiera quejas por los nombramientos.
Otra decisión que generó buenas sensaciones fue la elección de Lucía Dammert como jefa de asesores del Segundo Piso, porque la socióloga estuvo desde el principio en la campaña y se ajusta al plan inicial.
También, durante la semana los partidos ya comenzaron a llamar a postulantes que aspiran a cargos más chicos en el sector público, y que pasaron los filtros, lo que tranquilizó a algunos militantes.
En Comunes también esperan un gesto en la definición de subsecretarías. “Siempre hay inquietudes cuando hay ampliación en el gobierno, por eso hicimos sentir nuestro parecer. De todas formas, confiamos en la decisión del presidente”, dijo una de las líderes más importantes del partido en el que esperan que Doris González, en Vivienda, y Rosario Olivares, en Educación, puedan obtener un lugar en el anuncio.
Las diferencias entre Comunes y el equipo de Boric, en todo caso, se arrastran desde la campaña. En el partido que lidera Ka Quiroz se sintieron postergados por el comando en el transcurso de las elecciones, situación que ya ha sido planteada por su dirigencia.
En los movimientos sociales que acompañan a Boric desde las elecciones, como Unir, Fuerza Común, Acción Humanidad y Renace, surgió el mismo reclamo. Dicen que no se han sentido incluidos en la toma de decisiones. De hecho, en las reuniones de diciembre se creó una comisión que iba a velar por mantener la comunicación con los movimientos sociales, pero no ha resultado de la mejor forma.
“Me hubiera gustado que Marcelo Díaz fuera ministro”, dijo Lorena Fries, diputada electa de Unir, a La Tercera.
En el partido que se generó más ruido fue en el PC. Más allá de los tres ministerios (vocería, Ciencia y Trabajo) que obtuvo en el gabinete, hay un sector que dice que no se siente representado por la “moderación” de los elegidos por Gabriel Boric.
Es más, el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, criticó al futuro ministro de Hacienda:
“Conozco la trayectoria de (Mario) Marcel y todos sabemos que es un defensor del credo neoliberal. Lo que a mí me importa es que él se comprometió con liderar las transformaciones que el Presidente Boric comprometió”, dijo en Radio Universo.
Otras críticas dentro del PC apuntan a las vocerías de Camila Vallejo y el rol que cumple en el comando.
Uno de los nombres que figuraba en la lista por el PC para postular a cargos públicos reclama que al no ser cercano a Vallejo, sus posibilidades de entrar al gobierno se vieron limitadas.
“El hermetismo con el que se ha tratado el tema genera desconfianzas, además no hubo ningún tipo de comunicación sobre el proceso”, advierte un dirigente del PC.
De todas formas, en la reunión en la Casona Cañaveral, Boric y Guillermo Teillier, presidente del PC -quienes tuvieron varias conversaciones en la semana-, desmintieron ante sus compañeros de coalición que los comunistas hayan sido los responsables de la postergación del anuncio de subsecretarios.
La pesadilla del quinto retiro
En los partidos de Apruebo Dignidad una de las dudas es la efectividad que tendrá la estrategia de Gabriel Boric. Algunos cuestionan que la asignación de ministerios vaya a ordenar las votaciones en el Congreso y desconfían del comportamiento de los parlamentarios de “Socialismo Democrático”.
Las pruebas más concretas de eso son las opiniones de distintos parlamentarios del sector sobre un posible quinto retiro de fondos de pensiones, al que Boric y Marcel se oponen. Por ejemplo, la diputada Marisela Santibáñez (PC) y René Alinco (Independiente/PPD) se declararon a favor de un nuevo retiro de las AFP, además de otros parlamentarios del sector.
Caso aparte es el de la diputada, y senadora electa, Alejandra Sepúlveda (FRVS), quien también apoya la medida. Sepúlveda manifestó su disgusto con la designación de su compañero de partido Esteban Valenzuela como ministro de Agricultura, debido a que habían postulado a otros nombres, con “más experiencia y conocimiento en el área”, por lo que no será fácil de convencer.
El jueves Jackson visitó al Congreso y se reunió con los jefes de bancada de los senadores del PS, el PPD, la DC y Apruebo Dignidad. Pero la cita no terminó bien.
Testigos de la reunión reconocieron que hubo una áspera discusión entre el diputado RD y el senador Alfonso de Urresti (PS). En ella el socialista le reclamó a Jackson por los mensajes por la prensa que ha enviado el presidente electo para que apuren el proyecto de indulto a los detenidos en el contexto del estallido social de 2019.
Además, el senador Francisco Huenchumilla (DC) se ausentó de la reunión por su molestia con el comando de Boric. Al abogado no le pareció que su partido no fuera incluido ni en los ministerios, ni en las subsecretarías, como aseguró el presidente electo en su primera entrevista en televisión.
El malestar de Huenchumilla se extiende a la DC. A la dirigencia del partido no les ha parecido la forma en que Boric ha llevado la relación con ellos. De partida, aseguran que no les gustó el gesto del mandatario electo hacia Joanna Pérez, quien es una de las candidatas a la presidencia del partido, elecciones que fueron pospuestas para marzo. Lo que no gustó, dicen en la directiva, es que Boric se haya metido en la interna cuando ellos se han mantenido distanciados de La Moneda chica.
La apuesta por la abogada Macarena Lobos, en la Subsecretaría de la Segpres, apunta directamente a resolver esas diferencias con los partidos y alinear las posturas en el Congreso. Boric confía en que la exsubsecretaria de Hacienda en el segundo gobierno de Michelle Bachelet pueda utilizar su experiencia trabajando con los partidos de la ex Nueva Mayoría para superar las tensiones.